Valle del Jerte

        De vacaciones por el Valle del Jerte, la tierra de mis abuelos paternos, y decididos a descansar antes de empezar las fiestas patronales, vamos a tiro fijo. La Pitarra del Gordo, un sitio emblemático que incluso ha salido por televisión, tiene el mejor jamón ibérico que yo haya probado...con beta y emanando grasita...En esta tasca placentina un vino de pitarra cuesta 1.40 €, el vino con un pincho de jamón también cuesta 1.40€ y si lo que quieres es probar el pincho también te lo sirven sin consumición por 1.40€. Pero como teníamos todo el día por delante y teniendo en cuenta que era la hora del vermut, nos decidimos a pedir otro vino con pincho. Cuál fue nuestra sorpresa cuando, para no repetir pincho, nos pusieron lo que fue el gran descubrimiento del verano: la morcilla patatera. El pincho en cuestión tenía este aspecto...

                                            

            Debido al desconocimiento pensamos que era sobrasada hasta que lo probamos. El sabor era literalmente (y como se dice en el norte): chorizo de la pota muy tierno untado en pan. El camarero se acercó y nos explicó que era morcilla patatera ante lo cual, llamé a mi padre para preguntarle y me contó que es típico de alli y que en mi pueblo podíamos comprarla. 

(Si me permitís un apunte, fijaos en el esquina superior derecha de la foto...el puesto de cencerros del mercado de Plasencia...algo realmente auténtico en cuanto cruzas el Negrón....y que por fin te da la sensación y la certeza que estás de vacaciones). 

           A pesar de llevar más de 30 años veraneando en la zona (desde que nací), es grato que la tierra te sorprenda con estas cosas cuando crees que conoces casi todo de la zona de tus ancestros.